lunes, 25 de mayo de 2020
Stéphane Mallarmé / La tumba de Edgar Poe
Tal como al fin el tiempo lo transforma en sí mismo,
el poeta despierta con su desnuda espada
a su edad que no supo descubrir, espantada,
que la muerte inundaba su extraña voz de abismo.
Vio la hidra del vulgo, con un vil paroxismo,
que en él la antigua lengua nació purificada,
creyendo que él bebía esa magia encantada
en la onda vergonzosa de un oscuro exorcismo.
Si, hostiles alas nubes y al suelo que lo roe,
bajo-relieve suyo no esculpe nuestra mente
para adornar la tumba deslumbrante de Poe,
que, como bloque intacto de un cataclismo oscuro,
este granito al menos detenga eternamente
los negros vuelos que alce el Blasfemo futuro.
Traducción de Andrés Holguín
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
-
Pedro Alonso Retamal / Epu Primero, todo era como una noche larga, como un huso de viento, hilándose en la espera del amanecer ...
-
El andaluz envejecido que tiene gran razón para su orgullo, El poeta cuya palabra lúcida es como diamante, Harto de fatigar sus esperan...
-
Pablo Neruda / Vjegetaciones A las tierras sin nombres y sin números bajaba el viento desde otros dominios, traía la lluvia hilos...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario